Danza de pensamientos
Fumé un cigarrillo, sólo me quedé admirando la manera en que el humo tocaba el viento, así nada más. Revolvía la sensación penetrante; todo daba vueltas, sólo pensaba en escribir, pero al hacerlo real, parecía que se disipaba el sentido.
Traté de gritar y no me dejaba. Me jalaba como cadena, me unía y oprimía el deseo de salir al fin corriendo y bailar.
¿Firmas realmente tu sentencia? Cambio de forma versátil e inestable. Tolerable para algunos, indescriptible en otros, seductora en pocos.